¿Cómo puede influir la arquitectura colonial en el resto del mundo?

Esta es una pregunta un poco extraña, pero a la vez interesante. ¿Puede influenciar la arquitectura colonial al resto del mundo? Te puedo dar mi visión personal: no.

Un diseño arquitectónico como el colonial, más bien fue influenciado o vino influenciado de otros países a donde se instaló y quedó. Serían muy pocas las ocasiones en los cuales este diseño con el pasar de los años haya influenciado al menos a 2 países, mucho menos al resto del mundo.

 

 

¿Cómo podría influenciar la arquitectura colonial?

Pues esto podría ser si en caso tal, el país al cual llegó esta influencia arquitectónica de otro país (un primer país), llegara e invadiera o protagonizara una evento como el de ser colonizador de otro Estado. Para ser más claro te daré un ejemplo:

Venezuela fue colonizada por los españoles, y de España fue de donde vinieron las influencias arquitectónicas con lo cual se construyeron las iglesias, muchas viviendas y algunos edificios gubernamentales.

El caso sería que Venezuela mucho después de haberse independizado de España hubiese colonizado otro espacio o hubiese entrado en otro Estado convirtiéndolo en provincia suya. Con ello, probablemente sucedería que las influencias arquitectónicas que venían de los españoles y que ya eran parte de Venezuela, pasaran a este nuevo territorio.

Este es un caso que posiblemente no se ha dado en la época actual, mas sí se dio en la época antigua, mucho antes de Cristo.

¿Por qué no se da la influencia arquitectónica colonial en el resto del mundo?

Pues sencillamente porque los países que fueron influenciados por sus colonizadores (como Venezuela), no tomaron como suyo este diseño arquitectónico, sino que estaban muy claros que esos diseños eran españoles, lo que hizo que hubiese innovación en los nuevos diseños y o simplemente dejaron  a un lado esa influencia de sus colonizadores.

Así que ya sabes la arquitectura colonial no ha influenciado a nadie, ella fue influenciada por otros diseños arquitectónicos.

 

 

Texto: Luis Enrique

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